jueves, 23 de abril de 2009

LA LUCHA ENTRE EL BIEN Y EL MAL



Las noches son las largas y calurosas, hacen que mi mente divague y no descanse luego de un día de pensar y pensar… pensar en el trabajo, en mi familia, en mis problemas y en algunos problemas de otros que en ocasiones no se los merecen.
Y creo simplemente que la maldad existe y no se aleja de las personas, es más, pese a lo practico, racional o consiente que estamos los seres humanos, hoy mas que nunca la maldad esta cerca nuestro, pienso muchas veces que la maldad no solo es una mala acción que busca el perjuicio del otro, también lo son la envidia, la prepotencia y la omisión de acciones.
Esto debido principalmente a que hay una compañera que esta sufriendo la maldad en torno a ella, la envidia de lo que tiene y ha logrado, pero como se supera, cuando lo racional se superpone a lo mágico, a lo místico y también a la fe ¿?, difícil pregunta, por que hay cosas a las cuales no se les puede quitar su peso, como son los malestares del cuerpo, los males de la salud, una enfermedad es real hasta que se demuestra lo inexplicable de ella, un mal repentino, un accidente estúpido, una mala interpretación de las señales me mueven a creer en la maldad de las personas… en aquella que te maldice, en aquella que no te desea mal pero te llega o en aquellas personas que simplemente recurren a la magia negra y embrujan a otros.
La maldad tal como las brujas y brujos existen, conviven con nosotros, pero no los vemos, están atentos a nuestras acciones y esperan en la oscuridad de la noche para entrar y corroer el cuerpo y nuestras almas… pero como nos salvamos o liberamos de esta maldad… solo con fe y magia de la buena… la que se lleva en el corazón y se entrega a los demás para cuidar y proteger a las personas.
Mi mamá me decía y hablaba seguido del mal de ojo, que a los niños los ojeaban y que lloran y no duermen sin tener una razón aparente para hacerlo, las hinchazones, ojos rojos u otros signos que hoy la ciencia "trata de sanar" con medicina o investigaciones, en el pasado reciente fueron sanados con una oración, un rezo de fe o agua bendita.
A donde voy… solo a pensar y creer que no hay nada mejor para sanar el espíritu que la fe, esa que yo he abandonado, pero que siguen en mi, esa que me dice que debo ayudar a quien lo necesita y que no debo quedarme callado, la gente buena necesita protección y es nuestro deber cuidarlas, con la herramienta que tengamos a mano y mas nos acomode desarrollar, yo quiero creer que frente a ritos y magia "negra", debe haber una fuerza y magia blanca, aquella que protege ayudado por la fe en un ser superior que nos creo y a quienes entrego a su hijo para nuestra salvación… mi camino será largo, es mucho el tiempo que he dejado pasar fin ayudar sin entender que en mi interior esta la verdadera fe, la magia para ayudar al que lo necesita.