NOVELITA POLICIAL

Era una tarde fría y misteriosa en donde todos los pasos se encaminaban al salón principal del colegio, todos se miraban con incertidumbre y dudas, sería posible que actos tan atroces estuviesen sucediendo en las aulas de este prestigioso colegio, se había especulado en el pasado que uno o dos alumnos pensaban distinto, pero nunca se había llegado a secuestrar y amordazar a uno de los alumnos, menos en horas del día en donde la luz del sol nos protege a todos…

La investigación había comenzado, la policía ya estaba en camino y la autoridad del colegio comenzaba a investigar, la niña plagiada había dado unos datos y una grabación que hizo en su pendrive de la voz del plagiador cuando la apretaba y arrastraba por los pasillos del colegio, extrañamente desocupados y carentes de toda vida escolar… con estos datos los profesores hicieron una preselección de alumnos a los cuales consultar, no faltaron los investigados por tener antecedentes de mala conducta o simplemente por ser distintos eran discriminados por su raza u origen social, la duda ya había sido plantada en la mente de todos, la tradición de tranquilidad fue vulnerada y el aire se hacía irrespirable para todos.

La policía ya con los datos en sus datos realizaba las primeras consultas a los sospechosos, los hacían ingresar a un salón con peritos de audio los que contrastaban las pruebas con la grabación hecha por la niña, luego de ver y analizar a muchos alumnos la pesquisa se redujo a tres alumnos, los que volvieron a entrar al salón y repitieron la prueba, luego de un largo rato dos de los alumnos salieron con un aire de tranquilidad y descanso que no tenían al entrar al interrogatorio, el tercer sospechoso había quedado al interior del salón en donde los policías aún no salían de su asombro al constatar que la muchacha de facciones suaves, tez morena y mirada penetrante era la hija de un distinguido Senador de la República a quien el comisario de turno había contactado ya para exponer los hechos y solicitar su presencia en el colegio.

Fuera de las instalaciones del colegio el revuelo periodístico era parecido al de un enjambre de abejas en su panal, el movimiento era unísono al ver acercarse cualquier vehículo todos corrían hacía él buscando identificar al ocupante y especular si era el padre de la víctima o del victimario, las persecuciones eran infructuosas e inútiles, solo apoderados que buscaban explicaciones a lo inexplicable. Entre los apoderados había ex deportista y periodista que aprovechando su condición de apoderado ingreso de los primeros al colegio alertado por su hijo de los acontecimientos, por lo que si bien buscaba a su hijo estaba indagando al interior del colegio y visitando las dependencias en busca de la nota que levantara su prestigio periodístico e hiciera olvidar que su llegada al mundo periodístico era por su condición de estrella deportiva… estaba en esos paseos por el colegio cuando dio con el salón donde se desarrollaba el interrogatorio, alcanzó a ver que ingresaban los últimos alumnos al interior del salón y luego que dos de ellos se retiraban, su deseo de investigar lo llevaron a buscar desde diversos ángulos alguna hendija por medio de la cual ver algo, pero el perímetro estaba completamente cubierto por la policía que al percatarse de su presencia comenzó todo un operativo de cierre y hermetismo de lo que acontecía al interior, los alumnos definitivamente estaban convulsionados y los apoderados indignados.

La policía comenzó a generar una protección al lugar, en ese momento se sintió la llegada de un helicóptero que aterrizo en la cancha del colegio y desde el cual descendieron muchas personas con impermeable, todos iguales tratando de ocultar a quien verdaderamente venía llegando, el periodista estaba entre la multitud y creyó identificar a uno de los que descendieron, lo encontró dudoso no podía ser un Senador de la República, sus hijos son todos modelos de rectitud y de virtuosidad para la sociedad, lo dudo, miro su celular y penso que su instinto y el estar en el lugar adecuado en el momento preciso era el momento preciso para lanzar su carrera como periodista, se decidió y llamó a su editor, la duda existía, pero si acertaba con un golpe periodístico llegaría a la cima…

Luego de descender del helicóptero el Senador fue llevado por la policía y los directivos del colegio al salón donde estaba su hija, el nerviosismo se veía en su rostro y las manos que mantenía juntas temblaban por la situación de enfrentar a su hija, al interior del salón ella solo veía como el rector, sus profesores y la policía la miraba, en un momento un silencio se sintió el rechinar de la puerta e ingreso el Senador, un silencio sepulcral llenó el hasta ese momento bullicioso salón la mirada de padre e hija se cruzaron en un momento todos salieron, quedaron solos cruzando la mirada… hola hija… hola papá respondió ella… qué has hecho, indagó él… a lo que ella luego de un minuto de dudas exclamo… solo quería estar contigo un minuto y decirte que te quiero, te extraño y ojalá creas en mí… tras esas palabras el hasta ese momento frío senador, rompió en llantos al darse cuenta que esa niña a la que había visto nacer y meció en sus brazos creció por sus actividades no la vio crecer y ahora estaba de pie frente a una niña que le pedia un minuto de su tiempo…